CUANDO LA ABUNDANCIA NO ES BUENA

En la mitología oriental, se creía que aquellos peces carpa (llamados peces Koi en Asia) que logren nadar rio arriba y alcanzar la cascada, se convertirían en dragones. Hoy en día, estos peces que simbolizan la abundancia, se tomaron a pecho el significado que se les dio ya que se encuentran en casi todas las aguas del mundo, perjudicando los ecosistemas.

“Pueden llegar a poner un promedio de 300.000 huevos” Afirma el doctor en Ciencias Biológicas, Tomas Maiztegui.

¿Qué podría tener de malo mas peces en el agua? Mas allá de lo estético y diverso que pueda sonar esto, el problema radica en que, al ser una especie invasora y no tener ningún depredador natural, esto hace que se distribuya rápidamente y afecta a las especies autóctonas como cangrejos, crustáceos. Pero lo más destacable es que nuestro querido pejerrey se encuentra en su lista de bocado favorito.

“Una de las particularidades es que es muy fácil de criar, una especie muy rustica y desde el punto de vista de la acuicultura es un aspecto muy importante, pero del mismo modo que es muy importante para la acuicultura, la especie tiene ciertos rasgos biológicos como la reproducción, alimentación la fecundidad hace que seas una especie que se prolifere de manera muy rápidamente en muchos puntos”, afirma el especialista en Ciencias Biológicas, Tomas Maiztegui

ME MUEVO POR AQUÍ, ME MUEVO POR ALLÁ

El arribo de estos peces icónicos de la mitología oriental en Argentina comienza aproximadamente en el siglo XIX, en la provincia de Entre Ríos con fines comerciales y de acuicultura, con ejemplares traídos de Brasil, se puede considerar que es el primer registro de una especia no nativa en el país. Sin embargo, su introducción oficial fue en 1925 en los estanques públicos de la ciudad de Buenos Aires y en 1945, el primer registro de esta especie en estado salvaje en el Rio de la Plata.

Con respecto a su distribución, podemos decir que en la década de los 80’ y 90’ se produce un aumento en el número de carpas en la región pampeana, la cual esta relacionada principalmente con las cuencas del Rio Salado y Sambormbon.

Vertical: Ilustra la cantidad de localidades argentinas invadidas por el pez carpa

Horizontal: décadas

Se plantea entonces, las 3 posibles vías de colonización en la región pampeana. La primera es desde el Rio Quinto, la segunda es desde el Rio Paraná donde se cree que proviene de escapes de criaderos oriundos Misiones y Brasil. Y la ultima vía proviene desde el Rio de la Plata, a través del Rio Paraná, invadiendo la Bahía de Samborombón y los canales artificiales.

“Para la provincia de buenos aires y la región pampeana, la especie se introdujo en ciertos puntos y se fue auto propagando. En el caso de nuestro país, influyó mucho la modificación del hábitat por parte del hombre”, asegura el Doctor, Tomas Maiztegui

Distribución del pez carpa a lo largo del país.

Negro: Cuerpos de agua artificial (lagos, estanques, embalses)

Blanco: Cuerpos de agua natural

A TODO TERRENO

Seguramente todos miramos rambo y nos quedamos sorprendidos por su fuerza y resistencia, ¿Qué te digo si nuestra especie invasora tiene un “aire”?

La razón por la cual estos peces invasores no necesitan pasaporte para ingresar a aguas extranjeras, es por las condiciones climáticas, basados en las condiciones ambientales y forma de las cuencas. Dichas áreas, se encuentra en América del sur, abarcando Argentina, Brasil y Chile.

Por lo general estos peces prefieren las aguas templadas de poca profundidad con fondos fangosos y arenosos. Pero gracias a las continuas introducciones y a su alta capacidad adaptativa, ocupa una gran variedad de hábitats como lo son: Embalses. humedales, grandes ríos, arroyos y estuarios.

“La carpa está prácticamente en todos los continentes salvo la Antártida. Presenta rasgos de tolerancia muy amplios, pueden estar en ambientes canadienses que se congelan en invierno, hasta ambientes templados/cálidos como en nuestro país o en España donde la temperatura puede ser muy cálida”, declara Tomas Maiztegui

Si nos ponemos a pensar en la dieta que hace nuestro pez invasor, podemos decir que es una especie que no le hace asco a nada ya que es un omnívoro, y eso implica que, dependiendo del ambiente en el que se encuentre, puede consumir alimentos que provengan tanto de origen animal y vegetal.

Otro aspecto a destacar es que durante los periodos de inanición (reducción de los nutrientes, vitaminas, e ingesta de energía) pueden disminuir su metabolismo cuando estos escasean.

INGENIERO ECOSISTÉMICO

Nuestra especie mitológica es catalogada como “ingeniero ecosistémico”, el cual es un término que se le designa a los organismos que tienen las condiciones de poder controlar los recursos, mediante la habilidad de provocar cambios físicos en el ambiente.

La especie produce alteraciones sobre la calidad del agua, la dinámica y composición de nutrientes y produce una disminución de la diversidad del ecosistema.

“Hace que los ambientes se enturbien y produzcan una disminución de la zona fótica que es donde llega la luz y eso produce que crezca menos cantidad de macrofitas que son utilizadas por una gran cantidad de invertebrados y vertebrados como zonas de refugio, entonces al no haber estas zonas de refugio, estas son depredadas, produciendo una alteración del ambiente”, afirma Maiztegui.

Acá es donde nos preguntamos, ¿A dónde vamos a parar? No hay duda que la problemática de las especies invasoras es un tema complejo. Tal como afirmó el especialista, “es casi imposible poder erradicar las carpas”, nos replanteamos si hay algún provecho que se puede sacar.

Maiztegui, nos contó que, en los Humedales de Ajo, se está poniendo en práctica utilización de pesquerías especializadas en la carpa que, como su nombre lo dice, trata de una red que se colocan en el agua y su tamaño de malla es grande para que la carpa pueda ser pescada (recordemos que es un animal que puede crecer hasta 20cm de largo). Para luego ser

consumida, sacrificada.

A pesar de tener una mala fama de saber a “barro” o tener muchas espinas. Se puede sacar otro beneficio que es, consumiéndola, esta especie es rica en proteínas y se puede hacer diversas recetas, eso sí, se recomienda saber el proceso de curación y de fileteado. Las recetas pueden ir, desde aderezos, hasta hamburguesas.

Entonces, nos planteamos, ¿Quién es el responsable? ¿El hombre o el animal? El debate podría no tener fin, pero lo que es claro es que la problemática de las especies invasoras es algo que tenemos que prestarle más atención, ya que no solo perjudica a nuestros diversos ambientes, sino que afecta a nuestras especies autóctonas y pone en riesgo la existencia de estas.

Fuentes:

http://sedici.unlp.edu.ar/bitstream/handle/10915/151783/Documento_completo.pdf-PDFA.pdf?sequence=1&isAllowed=y (mapas y gráficos)